Para los que nos hemos criado cinematográficamente con películas como "Sorgo rojo" (1988), "La linterna roja" (1991) y "¡Vivir!" (1994), que nos hacía creer que el cine chino era una continua retrospectiva del mundo rural de esas tierras, nos cuesta concebir la reconversión de su director más internacional, Zhang Yimou, en un fabricante de superproducciones al más puro estilo Hollywood.
Pero el sendero que empezó a recorrer con "Hero" (2002) y "La casa de las dagas voladoras" (2004) parece haber llegado a su máxima expresión con "La gran muralla" (2017):
En fin, "un film para prestar atención por su director como siempre. Solo espero que el arco argumental principal no consista en una misión de rescate de Matt Damon, que eso ya lo tengo demasiado visto".
No tiene mala pinta como pelicula, pero ya veremos. Personalmente el cine chino me gusta bastante, y he consumido muchas de las peliculas de kung fu raras que tienen xd
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