La madre de todos los retrasos

Bueno, lo de las secuelas de "Avatar" (2009) se está convirtiendo en el culebrón de la década. Ya nadie lo recordará pero cuando se anunciaron en 2010 James Cameron hablaba de solo dos secuelas. Siete años más tarde y con cuatro retrasos a cuestas del segundo film de la saga (2015, 2016, 2017 y 2018), los mismos que el número de entregas que serán, parece que se está convirtiendo en un problema mayor para 20th Century Fox.

Y es que lo que era la solución para la pérdida de los derechos de Star Wars puede transformarse en el ataúd de uno de los grandes estudios de Hollywood, situación que no acontece desde 1981, cuando la United Artists se fue a mejor vida después de un error de similares características. 81 años de historia de un estudio pueden irse al garete si James Cameron no vuelve a hacer magia de nuevo, algo improbable pero posible dado que alguna vez tiene que cometer un error.

Yo cada vez tengo más claro que le está costando encontrar la tecla que solucione los tres problemas fundamentales que tiene su saga de pitufos gigantes: el creciente desinterés por el 3D, lo que provoca que las entradas ya no den los réditos esperados en taquilla; la cada vez más patente desunión de los milénicos con el planteamiento y el argumento del film inicial según se van acumulando los años; y la más lacerante de todas, que probablemente los efectos digitales propuestos inicialmente estén tan desfasados que haya entrado en una loca carrera consistente en redefinirlos cada vez que ven un nuevo film de la factoría Disney. Obviamente un dilema de difícil solución dado que por el momento, salvo que tenga en su poder la Piedra Filosofal, afrontar cualquiera de estos problemas requiere una ingente inversión de dinero que la 20th Century Fox no tiene o no quiere dar.

En fin, "si ya decía yo en ese lejano enero de 2010 que "Avatar" (2009) era un gigante con pies de barro cuyo única gracia se encontraba en el nivel de efectos especiales mostrados (véase: "Avatar, la crítica de Ucronía latente"), nunca vistos en esa época, dudo mucho que una serie de 4 secuelas pueden levantar la función al nuevo nivel que requiere la 20th Century Fox. Ahora bien, es James Cameron y por el momento siempre ha conseguido desdecirme".