Y el curso acabó al fin. La verdad es que este último trimestre aunque corto ha sido bastante intenso. Pero todo llega a su fin y de nuevo la responsabilidad del cuidado de mis alumnos recae completamente en sus padres, los cuales no tienen ni la menor idea de lo que les espera. Aquí va mi surrealista homenaje para este fin de curso.
Retornando a mi más olvidable infancia he rescatado este éxito del sempiterno grupo infantil Parchís:
Dejando a parte la terrible coreografía (de la que me niego a hablar), me quedo con la siguiente sección, descriptiva a dolor:
"Ya terminaron las clases, y aunque estamos tan a gusto unos meses sin problemas, no sera ningún disgusto.
Viviremos unos días, en completa libertad, pobrecitos nuestros padres, lo que van a soportar..."
En fin, "en alguna ocasión me tenía que permitir una nota de humor completamente surrealista, que en ocasiones me pongo demasiado serio por estos lares"
A picar piedra ponía yo a los maestros durante estos dos meses, que sepan lo que es trabajar de una vez.
ResponderEliminarOtra opción era ponerlos en las playas de Benidorm para que ayudaran a los viejecitos alemanes, que son los que pagan sus menguadas nóminas, a ponerse bronceador por la espalda (o donde fuere que lo necesitaren).
ResponderEliminarme ha matao el highquality del enlace de youtube... low quality que es, unas fotos instantaneas con el marco blanco?... Jaaaasus.
ResponderEliminarAla jesusito a disfrutar de la vida a costa de unas oposiciones y gracias a tus conciudadanos (o era al revés...)
A los fans de la "manzana gay" les encantará recordar estos anuncios:
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