Espera, ¿ya van 18 días? ¡Madre mía! Cuando parecía que el tema preferido de la Unión Europea iba a cambiar para alegría de los frenéticos mercados, vuelve a sonar de nuevo en los medios de comunicación la vieja canción, la parálisis europea. Da lo mismo que les avisen por activa y pasiva, que les acojonen los mercados o que les imploren desde las potencias emergentes (o las que están en declive), los gobernantes de Europa sólo conocen una letra, cada cual debe defender lo suyo en la Cumbre de jefes de estado de la Unión que empieza esta noche con una cena (he estado tratando conseguir el menú, pero me ha sido imposible) y salirse del guión sería considerado una traición en su propia tierra. Así que como siempre lo único que saldrá de semejante desaguisado será un acuerdo de mínimos que no servirá para nada ni satisfará a nadie.
Y así lo han interpretado los mercados, que gracias a la inestimable ayuda de Mario Draghi (el nuevo presidente del BCE) se han dedicado a atacar de nuevo a toda la deuda europea (salvo la alemana, que anda tan feliz con sus tipos casi marginales). A España le ha tocado una nueva subida de la prima de riesgo de 47 puntos básicos, colocándose en los 380 (poco dura la alegría en la casa del pobre, y aún queda mañana para subir otros 50), y la Bolsa se dejó un 2,12%.
En cuanto a los medios españoles de derechas, aunque parezca increíble, se felicitan por la posibilidad de reabrir el juicio del 11-M, ya que cabría colar la teoría conspirativa de que el atentado lo organizaron ETA y el PSOE. Una cosa es la revancha política y otra dedicarse a la política ficción. Pero obviamente Pedro J. Ramírez, Luis María Ansón e Isabel San Sebastián algo tendrán que hacer durante los próximos años después de cumplida su misión.
Por otro lado, aunque ya sé que debería haberlo dicho en la entradilla, hoy al fin pudimos oír el primer discurso de Rajoy después de ganar la elecciones. Fue tan vacío, que casi se me saltan las lágrimas al escucharlo, ya que lo único nuevo que añadió con respecto al discurso de victoria fue que haría todo lo que quisiesen tanto Merkel como Sarkozy (bueno, eso es lo que ha leído un servidor entre líneas). Te lo dejo completo, que es cortito, para que lo disfrutes:
Sólo espero que le haya dicho algo más a Barroso, Merkel y Sarkozy esta mañana, porque si no habrán flipado. Y más Zapatero teniendo que defender esta noche semejante postura. Pero que le vamos a hacer, eso es lo que han querido los españoles. "Sólo quedan 1443 días".
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