Presa rota

Algunas veces una comunidad crece a la sombra de una gran tragedia que pervive a lo largo de los años. En mi caso, me pasé mi juventud oyendo historias sobre la rotura de la presa de Vega de Tera que desoló Ribadelago la madrugada del 9 de enero de 1959. Murieron en esa ocasión 144 personas bajo la tremenda riada que se desplomó a través del Cañón del Tera. Estoy hablando de la mayor catástrofe que una fuente de energía moderna ha provocado en este país y que casi nadie recuerda.

Para la gente que nacimos o vivimos en Zamora es siempre obligado visitar el Lago de Sanabria, el mayor de este país y el único de origen glaciar, que a la par se encuentra en un extraño enclave que separa tres territorios completamente distintos de la península ibérica: Galicia, Portugal y País leonés (esto último es una pequeña licencia que me tomo dada mi ascendencia maragata).

Lugar donde son de obligada visita cuatro lugares: el propio lago, la Laguna de los Peces (también de origen glaciar y donde se pueden ver todavía algunos neveros), y obviamente, el consabido Cañón del Tera y los restos del destruido Ribadelago.

Con el paso del tiempo la magnitud de lo ocurrido ha ido cayendo en el olvido pero para que te des cuenta te dejo con este pequeño extracto de un NO-DO de la época:



Éste es el pequeño homenaje que quiero dar desde este pequeño blog, pero si quieres saber mucho más sobre esta tragedia te conmino a ver el reportaje que se emitirá mañana en La 1 en "Informe Semanal" sobre la tragedia. Además también se emitirá un documental en La 2 dentro del programa "Documentos TV" el martes 13 de enero.

Ahora simplemente "me quiero unir al tañido en recuerdo del suceso que realizaron anoche la mayor parte de las iglesias zamoranas".