Sorteo de grupos

Me gusta bastante el fútbol y algunas veces hago alarde de ello en mis clases. Uno de esos momentos es cuando tengo que crear los grupos de taller. La política habitual en mi departamento es que el profesor realice los grupos para que estos queden en cierta forma equilibrados y terminen yendo, más o menos, al mismo ritmo.

Por otra parte el deseo de los alumnos obviamente es juntarse con sus amigos para pasar un buen rato en el taller, lo cual va en contra del ideal pedagógico ya que los grupos siempre quedan desequilibrados.

Yo he optado por una solución intermedia. Emulando el sorteo de grupos de la "Champions League", asigno a cada alumno a un diferente bombo (en mi caso un triste vaso de plástico) en función de la nota sacada en el primer trimestre y realizo el sorteo sacando de otro bombo el grupo que le corresponde. De esa forma me aseguro que los grupos en cierta forma son equilibrados y además evado mi responsabilidad en su composición ya que no puede protestarse lo que por suerte te ha tocado.

Por cierto, durante el sorteo, mis alumnos se lo pasan en grande hasta que saben con quien les ha tocado.

La excusa que les doy para hacerlo de esta forma es que nunca se sabe con quien te va a tocar trabajar en el futuro y que no tiene que gustarte necesariamente, "aunque creo que lo hago por mi afición al deporte rey ya que seguramente existe alguna manera sencilla de hacerlo sin montar semejante circo".