domingo, 26 de febrero de 2017

Mi opinión sobre las películas nominadas de este año (2017)

Este año toca modificar un poco el formato de esta entrada. Si en ediciones anteriores analizaba pormenorizadamente las películas nominadas a Mejor Película (me costaba un horror conseguir ver solo las agraciadas en esta categoría, como plantearme el resto de categorías), en esta ocasión tengo que simplificar el análisis para acoger las categorías principales dado que después de un maratón de proporciones casi épicas y buena planificación un servidor al final ha visto 29 de los filmes nominados (27 películas y 2 cortometrajes), casi todos ellos en versión original, con lo que he alcanzado 88 de las 122 nominaciones (un 72%, una cifra loable para un aficionado como yo). De las que me disponía a ver solo me han faltado "20th Century Women", "La vida de Calabacín" y "El viajante". En lo que he fallado ha sido en dejar tiempo suficiente para atacar este artículo, de ahí que con un parrafito por nominación cubra el expediente en esta ocasión. Y más teniendo en cuenta que no he leído ninguna crítica para no verme influido por la corriente dominante.

Vaya por delante que de lejos la mejor película de estos 29 filmes es la infravalorada tanto por público como por crítica (estos últimos menos, pero un 75 en Metascore no le hace justicia) "Tanna".

Bueno, vamos primero con las nominadas a Mejor Película, como siempre de mejor a peor:



¿Qué hace grande a una película? Para muchos puede ser su belleza formal, para unos pocos la historia que cuenta, original o reciclada. Es obvio, que al igual que pasa frente a un novela o un disco de música, el espectador también tiene influencia en la valoración del filme. No se puede mirar con los mismos ojos una obra concebida en los años 30 que una formalmente análoga creada en esta década. Siempre es necesario tratar cada obra con perspectiva.

"Moonlight" es a mi parecer la mejor película entre las nueve nominadas a esta categoría. Dividida en diferentes capítulos nos muestra la evolución personal de su protagonista (algo que invalidó de salida las nominaciones a Mejor Actor) a lo largo de las últimas décadas con un tono documental contenido. La verdad es que Barry Jenkins lo tenía bastante difícil dado el planteamiento inicial del personaje al combinar en éste los temas más candentes: integración racial, drogadicción y homosexualidad. De ahí que optase por darle una cierta patina de cuento tradicional, donde tres o cuatro hechos puntuales marcan la existencia completa de todos los personajes. Esta aproximación hace que la película, aun siendo dura, funcione bien y sea de fácil deglución (y digestión si eres norteamericano).

Por cierto, el final, uno de los mejores que he visto este año.





Tal vez estemos, como dijo un buen día Juan Raigada, ante la mejor película de ciencia ficción de la década. La comunicación, esa que últimamente está en franco retroceso, es el eje fundamental de la historia (dejemos aparte los intrincado estudios de lingüística). Denis Villeneuve consigue crear una atmósfera más propia del maestro Kubrick (que probablemente no tendría demasiados problemas en firmar una película de estas características aunque la hubiese hecho más oscura e incompresible si cabe) que el estilo Spielberg imperante en la actualidad. Lo cual no es baladí en cuanto estamos ante un obvio reciclaje de "Encuentros en la tercera fase" (1977) y "Abyss" (1989), los otros dos filmes que se atrevieron a atacar el mismo problema.

Por otro lado Amy Adams le da un tono especial, con una interpretación contenida que incomprensiblemente no ha merecido una nominación.

Ahora bien, hay que reconocer que la película tampoco es perfecta, tiene algunos fallos hacia la parte final del filme que le hacen perder la magia del principio (ese que probablemente rodaría Kubrick sin cambiar ningún plano) en post de no dejar desamparados a los espectadores ante semejante vorágine intelectual y facilitarle una explicación medianamente satisfactoria y comprensible de lo que estaban viendo. Amén del eterno recurso al número 12. En serio, no pueden ser 11 o 17. Parece como si ninguna especie inteligente del universo apreciase los números primos.

En fin, puede que Denis Villeneuve tenga la llave del futuro filme de ciencia ficción que al final gane, probablemente inmerecidamente como suele pasar siempre, el Oscar a Mejor Película.



3. "Lion"


Todos los años igual, parece que se va a convertir en costumbre que el tercer mejor filme sea aquel que está dividido en dos partes bien diferenciadas. Si el año pasado estaba asombrado con la magia de los primeros 60 minutos de "La habitación" (2015) en esta ocasión he terminado prendado de nuevo con los 50 primeros minutos de "Lion". Son simplemente hipnóticos, de lo mejor que se ha hecho este año. Ahora bien, lo que se podía haber convertido en una película redonda, de nuevo, se pierde en un dramón casi infantil en su segunda parte, más grande por desgracia, protagonizada por actores con inmerecidas nominaciones como Dev Patel y Nicole Kidman (gracias a Dios que se han ahorrado de la Rooney Mara, que en lo fundamental hace de Rooney Mara).

Y es que entiendo que es muy difícil hacer un filme basado en hechos reales, ya que la verosimilitud prima, pero el tono documental dado a la primera parte (que actúa como un inmenso prólogo), obviamente basado en un voluble recuerdo infantil, no merece ese desatino de segunda parte. A veces es mejor obviar en parte la realidad para obtener un filme mucho más equilibrado (en el fondo la vida real de la gente es bastante aburrida). O al menos esa es mi opinión.





Antaño en Hollywood era fácil vender una película como Manchester frente al mar". El drama y la comedia eran los géneros preferidos por los académicos y el resto, salvo las históricas y los musicales, tenían serias dificultades para alcanzar la estatuilla (eso es lo que explica que un filme como "Rocky" (1976) alcanzase el cielo). Ahora dominan la fusión de géneros, las películas crepusculares o las reinterpretaciones tránsgenero. De ahí la valentía de la propuesta Kenneth Lonergan al traernos una historia más propia de filme de sobremesa, obviamente de difícil digestión para las nuevas generaciones más preocupadas por el ahora, que de una película nominada a los Oscar.

Y es que Kenneth Lonergan nos propone un viaje al duelo y a la incomprensión de la comunidad. Los errores se pagan eternamente, da lo mismo lo que hagas para tratar de reinterpretarte, una y otra vez el pasado vuelve a recordarte quien eres y porque te pasa lo que te pasa. Ahora bien, lo que podía devenir en un atroz melodrama donde la realidad de la situación se torna en increíble para el espectador es sabiamente reconstruida tanto desde el guión, al facilitarnos a cuentagotas las claves para interpretar lo que le está sucediendo al protagonista mediante unos bien medidos flashbacks, como del punto de vista formal al elidir mediante música las partes más cruentas de la historia. Vamos, que estamos siempre a ras de caer en la lágrima fácil pero siempre consigue bajar el tono un poco para que podamos avanzar en la historia.

En fin, una película hábil y altamente recomendable para todo aquel que quiera comprender como funcionan las pequeñas comunidades norteamericanas. Y es que el drama no ha muerto, pese a quien le pese.





Estoy un poco asombrado en cuanto a lo poco que la gente sabe sobre el western. Da lo mismo que incesantemente le diga a la gente que no va de indios y vaqueros, eso casi pasó a la historia hace casi 50 años, amén de que los filmes más aclamados de este género poco o nada que tienen que ver con esta visión sesgada. El western es una excusa temporal y formal para tratar los temas de más acuciante actualidad, siempre ha sido social. Si antaño trataba sobre la relación con las minorías en desaparición y la quimérica imposición de la ley, en la actualidad trata de la difícil digestión de que los colonos que dominaron Texas y los estados aledaños han pasado a convertirse en los nuevos pueblos indígenas, viendo que su estilo de vida e idiosincrasia van desapareciendo poco a poco sin que puedan hacer nada para evitarlo.

Esto es lo que vemos en "Comanchería", un fiel reflejo de como se han transformado esas tierras, dejadas de lado por la recuperación económica impulsada por Barack Obama y que actualmente han convertido en un granero casi infinito de votantes de Donald Trump (la escena del mestizo Alberto Parker viendo un discurso de Paul Ryan no tiene precio, la carcajada que solté se oyó en todo mi edificio).

Así que tomando de nuevo como excusa una de las historias más trilladas del género, la fuga hacia delante sin frenos, y utilizando como referencia cinematográfica el "Fargo" (1996) de los hermanos Coen (sin llegar a la elegancia de estos) David Mackenzie firma el mejor filme de su etapa norteamericana por el momento, pero que en esta ocasión se queda un poco lejos de poder obtener la tan ansiada estatuilla aun siendo un tiro de lo más certero (otro año a lo mejor se hubiese llevado el gato al agua).





Sí, que me lluevan los huevos ahora. Me he atrevido a colocar en sexta posición la película que ha arrasado tanto en público (donde está haciendo unas taquillas más propias de una película de superhéroes que de un musical supuestamente intimista) como con la crítica, que no deja de premiarla. De nuevo nos encontramos con un filme concebido de arriba a abajo para arrasar en los Oscar. Lo tiene todo: una pareja con supuesta química, referencias cinematográficas y musicales a mogollón, un flashmob, sueños realizables, montajes molones y una deuda por parte del Academia. Es el nuevo "The Artist" (2011) para horror de un servidor.

Vaya por delante que estoy en ese 10% de público que no ha decido comprar esta voluptuosa y empalagosa propuesta de Damien Chazelle que persigue conseguir el Oscar que le negaron por "Whiplash" (2014) hace un par de años (la mejor de ese año para un servidor como puedes comprobar en "Mi opinión sobre las películas nominadas de este año (2015)"). Me parece excesivamente academicista (con tantas obvias referencias cinematográficas a tiempos pasados mejores que raya lo grotesco), tramposa en cuanto propone una especie de refrito del musical, casi elidido (me cuesta recordar si he visto más de tres números musicales), adaptado al nuevo público, y milénica, al vender el sueño de Hollywood según esta versión plomiza donde realmente importa el ahora y al final el precio a pagar es pequeño por las decisiones tomadas, todos los caminos son buenos al terminar la función. Esto último es lo que más me horroriza del filme, los dos finales planteados en la última escena, como si de un menú se tratase para que el espectador escoja el que más le guste (te aseguro que dentro de unos años más de uno dudará que cual es el final real de este largometraje).

En fin, estoy seguro que dentro de un par de décadas entrevistarán a Damien Chazelle y éste contará con pelos y señales como fraguó este filme para conseguir el Oscar que le negaron, reconociendo que para nada define su carrera como director. Solo espero que no comience una moda de malas imitaciones que nos empalaguen durante el próximo lustro tratando de reeditar el éxito de ésta.





Bueno, el resurgimiento de Mel Gibson como director merece esta posición. Que no está mal visto el percal de este año. Y es que aunque la película en lo que es su esqueleto, obviamente gracias a que la historia de referencia, funciona bien, falla en lo formal. La interpretación Andrew Garfield es pasable, Hugo Weaving está bastante sobreactuado (de ahí que no haya sido nominado) y al aclamado montaje de la batalla le sobra un cuarto de hora de vísceras volando. Amén del horrible final mesiánico (y es que al final la cabra siempre tira al monte) que termina estropeando la función (lo de batear una granada con la mano, aunque pasase en el realidad, queda como un pegote).

Lo siento, "La chaqueta metálica" (1987) sigue siendo insuperable para Mel Gibson, obvia referencia a la hora de analizar este filme, y más cuando éste intenta animar la función añadiendo a mitad de la película la aclamada escena y que por desgracia le valió un Oscar injusto de "Salvar al soldado Ryan" (1998) de Steven Spielberg. No casa para nada la ternura de la primera parte, con un entrenamiento que tuvo que ser más atroz, con la desquiciada ferocidad de la parte media y ese final propio del director que antes he comentado.

En resumen, una obra que ha caído en la equidistancia entre Kubrick, Spielberg y Gibson. A veces es mejor decidirse por algo aunque el resultado no te guste, ya que quedarte a medio camino de todo no funciona seguro.



8. "Fences"


Teatro, de nuevo no encontramos con el enésima obra de teatro que llega a la carrera final de los Oscar. Y repito de nuevo como siempre: el teatro no es cine. Las interpretaciones son muy buenas. Se nota el trabajo realizado por todos los actores. La historia te atrae irremediablemente y te cautiva. Entras con facilidad en el juego de discernir que es realidad de lo que es falso en la verborrea incesante de Denzel Washington pero el encierro autoimpuesto por el director en ese en ocasiones claustrofóbico patio (algunas veces se dejan caer por la parte delantera de la casa o el interior del mismo, más por cuestión formal que por necesidad) limita en demasía la función. Poco o nada te importa lo que pasa en el exterior. De ahí que tengas que deglutir lo que acontece a los personajes sin ningún apoyo visual.

Los únicos elementos reseñables desde le punto cinematográfico es el plano, sabiamente eliminado, de la muerte del personaje interpretado por Denzel Washington (que obviamente pervive en la atmósfera del último acto) y que en otras condiciones le hubiese valido un Oscar, y esos planos del cielo del final. Demasiado poco bagaje para esta contienda.

En fin, el puro teatro nunca triunfará ya en esta época y menos aún viendo la vertiente que está tomando el cine de autor.





"Figuras ocultas" es una película entretenida que se ha colado en esta entrega de los Oscar sin merecérselo demasiado. Probablemente algo haya tenido que ver la caída en desgracia de "El nacimiento de una nación" (2016) de Nate Parker. Es un biopic que cuenta con toques cómicos (en algunas ocasiones excesivamente reiterativos) la historia de tres brillantes mujeres científicas afroamericanas que trabajaron en la NASA a comienzos de los años sesenta. Lo hace sin estridencias, de forma suave y fácilmente digerible en el contexto social que impera en los Estados Unidos actualmente. El problema es que le falta algo de garra, parece que Theodore Melfi ha desaprovechado un excepcional trabajo de investigación, que se nota en las recreaciones de los diferentes escenarios y módulos, en la búsqueda de hacer una película para todos los públicos donde nadie quede demasiado mal.

Las interpretaciones está bien pero sin llegar a destacar en demasía. Acaso resaltar más por su pundonor que por el resultado final las de las supuestamente contrapartes malvadas blancas, Jim Parsons y Kirsten Dunst, que al final encuentran su redención (como cabía esperar de un producto de estas características).

En fin, si te gustó "Elegidos para la gloria" (1983) disfrutarás de esta recreación de lo que pasó entre bambalinas para que finalmente los norteamericanos ganasen la carrera espacial por el momento (últimamente les están saliendo demasiados enanos).



Y ahora, por primera vez en la historia de este blog, con los nominados a Mejor Director siguiendo la misma metodología:

1. Barry Jenkins por "Moonlight"

Su película es la mejor de las nominadas a esta categoría, amén del trabajo con tres actores distintos para que sean capaces capaces de recrear la vida de un único personaje manteniendo los gestos comunes en su evolución. Eso debería bastar para que ganase el premio, pero por desgracia probablemente no sea así.


No voy a negar que Damien Chazelle ha realizado un trabajo encomiable llevando hasta el final su apuesta por ganar el Oscar que le fue negado hace dos años. Tal vez lo mejor de "La ciudad de las estrellas (La La Land)" sea su dirección, ya que consigue que la función avance sin que se desliguen los innumerables elementos inconexos con los que ha decidido regalarnos.

3. Denis Villeneuve por "La llegada"

Pulcritud es lo que define la esplendida dirección de Denis Villeneuve en "La llegada". No hay ninguna estridencia que resalte en demasía en esta película, que por su argumento y temática es proclive a ella.

4. Kenneth Lonergan por "Manchester frente al mar"

Otro ejercicio de dirección mayúscula, consiguiendo de los actores, para nada habituales en estas lides, tal vez las mejores interpretaciones de su vida. También resaltar la utilización del recurso musical para rebajar en intensidad los elementos más dramáticos de la película.

5. Mel Gibson por "Hasta el último hombre"

Lo siento, pero como dije anteriormente, aunque el paciente, Mel Gibson, ha mejorado ostensiblemente con respectos a sus últimas propuestas, sigue sin encontrar su propio camino. Reciclar a mejores directores que tú no suele resultar bien. De todas formas debería seguir perseverando en este camino.

Ha llegado el momento de los actores. En primer lugar los nominados a Mejor Actor (a partir de ahora solo incluiré imagen y tráiler de los filmes que no se encuentran entre las nueve nominadas a Mejor Película):

1. Casey Affleck por "Manchester frente al mar"

Tal vez el único Oscar seguro de la noche. ¿Acaso alguien duda que Casey Affleck no merece este Oscar? Es con mucho la mejor interpretación del año en un papel de clase media sin más referencia que un guión. Nada más que decir.

2. Denzel Washington por "Fences"

Tengo que reconocer que Denzel Washington se preparó con todo su corazón este papel. Los primeros veinte minutos de la película (un rollo de celuloide completo de la vieja escuela) con su verborrea incansable son simplemente magníficos.

3. Viggo Mortensen por "Captain Fantastic"


Otro papel para el lucimiento de su protagonista. "Captain Fantastic" gira completamente alrededor de la interpretación de Viggo Mortensen, el problema es que el resto de la película no acompaña, con sus hilarantes diálogos y su giros inexplicables (la fuga de la doctorada tribu de los Brady sin que la policía les persiga le resta bastante verosimilitud en un producto que supuestamente va de real, entre otras lindezas que contiene el film).



4. Andrew Garfield por "Hasta el último hombre"

Lo siento, pero a Andrew Garfield todavía le faltan algunos hervores para convertirse en ese gran actor que ven en él gente como Mel Gibson o Martin Scorsese. Dentro de una década hablamos.


Ja, ja, ja... ¿En serio? Me da lo mismo que haya ganado el Globo de Oro, ni por asomo debería estar nominado por esta interpretación en la que deambula por la pantalla esperando a que Emma Stone le elija.

En segundo lugar las nominadas a Mejor Actriz:

1. Isabelle Huppert por "Elle"


Aunque parezca increíble ha sido Paul Verhoeven el que ha logrado que Isabelle Huppert haya conseguido realizar la mejor interpretación de su carrera, en un papel básicamente análogo (bueno, en una versión más ligera) al que le llevó al estrellato cinematográfico europeo y que siempre trato de olvidar. Me estoy refiriendo a "La pianista" (2001) de Michael Haneke y esa bañera blanca teñida de rojo.



2. Ruth Negga por "Loving"


Otra genial interpretación, infravalorada por la crítica a mi parecer, donde da el contrapunto a Joel Edgerton en ese difícil biopic llamado "Loving" que ha creado Jeff Nichols (y que por desgracia de nuevo sigue en la segunda división de directores).



3. Meryl Streep por "Florence Foster Jenkins


Oye, ya sé que es la vigésima nominación de Meryl Streep, muchas de ellas inmerecidas, pero en esta ocasión se la merece por recrear de una forma tan genial Florence Foster Jenkins. Un papel difícil en estos tiempos que la comedia parece en decadencia.




Mira, puede que gane el Oscar, pero en vez a Mejor Actriz deberían dárselo a Mayor Sosita en pantalla. De todas formas muy por encima de su compañero en pantalla. Es le mal necesario para justificar que "La ciudad de las estrellas (La La Land)" gane el Oscar a Mejor Película.

5. Natalie Portman por "Jackie"


Ya sé que mucha gente está enamorado de esta interpretación de Natalie Portman, pero a un servidor le pareció más una fotocopiadora humana que otra cosa. Por otro lado Pablo Larraín ya se preocupo de eliminar cualquier atisbo de magia que le pudiese ayudar en su empeño.



En tercer lugar los nominados a Mejor Actor de Reparto (es triste, según están colocados en la nominaciones, ningún cambio de posición):

1. Mahershala Ali por "Moonlight"

Sí, Mahershala Ali se merece el Oscar por su interpretación de un narcotraficante de origen cubano de corazón de oro. Cualquier otra cosa será una tomadura de pelo.

2. Jeff Bridges por "Comanchería"

No está mal la interpretación Jeff Bridges, tal vez la compraría en otra ocasión, pero su fuerza se encuentra en el genial guión de Taylor Sheridan, que le pone las cosas fáciles.

3. Lucas Hedges por "Manchester frente al mar"

Lo siento, el chaval no lo hace nada mal como adolescente en "Manchester frente al mar", pero Casey Affleck se lo come en cada plano.

4. Michael Shannon por "Animales nocturnos"


No está demasiado mal. Tal vez un poco sobreactuado. Aunque no llego a entender porque se encuentra nominado.



5. Dev Patel por "Lion"

Sí, en último lugar el otro favorito. Es a uno de los actores que hago responsable de que "Lion" no se haya convertido en el mejor filme del año. No sé que ve la gente en su ramplona e insufrible interpretación.

Y en cuarto lugar las nominadas a Mejor Actriz de Reparto:

1. Naomie Harris por "Moonlight"

He dudado hasta el último momento entre ella y la siguiente. Al final he decidido comprar su interpretación de una madre drogadicta, llena de aristas difíciles de captar en todo su esplendor.

2. Viola Davis por "Fences"

En este caso, contener en pantalla el torrente de verborrea de Denzel Washington con una sola mirada es una interpretación que vale un premio. Si lo gana no lo consideraré injusto. Están ella y Naomie Harris muy igualadas.

3. Octavia Spencer por "Figuras ocultas"

Vale, no está mal. Hace lo que puede con esas "Figuras ocultas" de juguete que se han colado este año. A alguien había que elegir del reparto coral de la película para justificar su presencia en la categoría reina.

4. Nicole Kidman por "Lion"

Solo decir que es la otra responsable de que "Lion" no ocupe el lugar que se merece.

5. Michelle Williams por "Manchester frente al mar"

Mira que me ha gustado "Manchester frente al mar" pero me pregunto si era necesario resaltar esta interpretación cuyo rasgo más distintivo es ser el atrezzo necesario para que avance la historia.

Sí, también me atrevo con las películas nominadas a Mejor Largometraje de Animación, que ha sido muy duro colocarlas por orden dado el impresionante nivel de este año:



Un peliculón se mire por donde se mire. De nuevo el equipo de PIXAR ya fagocitado por Disney ha dado con la tecla. Tratar los temas de la segregación racial y de la igualdad de oportunidades en una película infantil merecería que se encontrase entre las nominadas a Mejor Película. Y más cuando utiliza como referente un género tan trillado como es el de las películas de compañeros.





Otra maravilla, sobre todo desde el punto de vista visual (la nominación a Mejores Efectos Visuales es merecida). Hacía tiempo que no veía una película en 3D que usase tan elegantemente esta técnica en retroceso. Si gana, tampoco me importaría.





La tercera contendiente tiene ese sabor extraño de la fusión intercultural. Trazos japoneses para una historia creada en Francia, que linda con el cine mudo en un intenso sonoro. De nuevo un filme que trata sobre la cohabitación de los polos opuestos desde una perspectiva única.



4. "Vaiana"


"Vaiana" tal vez sea uno de los productos más refinados que ha fabricado la factoría Disney. Combina sin pudor todos esos elementos que le han hecho grande a lo largo del último siglo. Los temas musicales vienen a cuento (nada que ver con la película que será laureada esta noche), la estética es fascinante (ese agua completamente realista) y la temática, con una mitología que no es esquiva para la mayor parte de los espectadores grandiosamente vendida (aunque supongo que con algunas licencias que disgustarán a los más puristas).



Sin evaluar. "La vida de Calabacín"


Al final no la he podido ver a tiempo. Así que no tengo nada que decir al respecto.



Y con las nominadas a Mejor Película de Habla No Inglesa:

1. "Tanna" (Australia)


Tienes que verla. Es con mucho la mejor película de las nominadas. Al utilizar a las propias tribus aborígenes como actores (algo grandioso en cuanto desconocen el concepto) en un entorno acotado pero paradisíaco nos ofrecen una historia basada en hechos reales sobre lo que un acto fortuito puede significar para una cultura completa. Lo tiene todo: historia de amor, canciones, escenas de acción, etc. Un viaje completo a una cultura que nos resulta ajena.



2. "Toni Erdmann" (Alemania)


Dado que entiendo que la película anterior es excesiva, mires por donde lo mires, para el gran público, tendremos que conformarnos con la favorita, este "Toni Erdmann" que nos llega desde Alemania pero que nos traslada a esa esquiva Rumanía que se encuentra dentro de la Unión Europea aunque muchos no se hayan enterado. Y sí, funciona bastante bien. Convirtiendo lo simplemente hilarante en probable. Sorprendiendo a cada giro de guión. Nunca ocurre lo que esperas.





El tema que esta película trata está tan trillado, la de un viejo cascarrabias que al final se descubre que tiene un gran corazón, que me costaba entender su nominación. A su favor tiene que utilice los diferentes intentos de suicidio y los flashbacks para ir dándonos a cuentagotas los diferentes elementos que nos permitan llegar a comprender como llegó a ser así. En su contra, al menos para un español, que el flashback fundamental de la función ambientado en España es tan surrealista que no merece comentario alguno. Por cierto, la nominación a Mejor Maquillaje es merecida.





Una historia sencilla sobre camaradería entre ganadores y vencidos en la Dinamarca de después de la Segunda Guerra Mundial, que utiliza como excusa la retirada de las minas de las playas danesas occidentales. Basada en hechos reales, es interesante pero al mismo tiempo peca de seguir la estructura de este tipo de filmes. Demasiado visto la verdad sea dicha. El patito feo de estas nominaciones.



Sin evaluar. "El viajante" (Irán)


Lo siento, no le ha podido ver tampoco. Ahora bien, puede que gane el Oscar gracias a Donald Trump.



Por último, sin que sirva de precedente, los guiones entran también en juego. En cuanto a los nominados a Mejor Guión original:

1. Kenneth Lonergan por "Manchester frente al mar"

El mejor por poco. Creo que ya he dicho todo al respecto en las categorías anteriores. Como suelta a cuentagotas toda la información necesaria para que nos hagamos una idea de lo que está pasando merece un premio.

2. Taylor Sheridan por "Comanchería"

Uff. Ha sido duro colocar en segunda posición este genial guión de Taylor Sheridan que firmarían sin problemas los hermanos Coen. Amo los westerns, da lo mismo en la época que se encuentren. Si gana, no me importaría.


Tranquilo, ahora verás porque este horror se encuentra en tercera posición y es que le pese a quién le pese "La ciudad de las estrellas (La La Land)" es un cascarón vacío. Puede que gane el Oscar para justificar la victoria a Mejor Película (los técnicos y Mejor Actriz es poco bagaje), pero sería algo lamentable.

4. Efthymis Filippou y Yorgos Lanthimos por "Langosta"


La historia empieza con cierto interés en esta surrealista distopía pero la reiteración del elemento especular como motor de la función hace que decaiga en la segunda parte. Da lo mismo que inunden el escenario con animales exóticos, el desinterés es mayúsculo en la conclusión. Por cierto, vaya mierda de final.



Sin evaluar. Mike Mills por "20th Century Women"


No la he visto, por lo cual tampoco puedo opinar.



Mientras que los nominados a Mejor Guión Adaptado quedarían colocados de la siguiente forma (basándome en el guión, no he leído ninguna de las novelas u obras de teatro que han tomado como referencia):

1. Barry Jenkins por "Moonlight"

La fuerza narrativa de este filme reside en su guión milimetrado. Toda una gozada que merece al menos este premio.

2. Eric Heisserer por "La llegada"

Una maravilla en su primera parte aunque decae un poco en la parte final al tener que explicar lo que se está viendo en pantalla.

3. Luke Davies por "Lion"

Como ya he dicho antes, dos partes bien diferenciadas. La primera tal vez la mejor del año, el problema es que cuando entran los adultos en acción se pierde gran parte de la magia, aunque para su descargo mucho tienen que ver las deplorables interpretaciones de los actores.

4. Tony Kushner por "Fences"

Solo cabe una pregunta: ¿Le costó mucho transcribir la obra de teatro?

5. Allison Schroeder por "Figuras ocultas"

Al igual que lo que pasó con la película no entiendo para nada esta nominación. Había otras películas que la merecían más.

Y sí, podría seguir con otras categorías en las que he visto todos los filmes contendientes (o al menos cuatro) como Mejor Banda Sonora, Mejor Fotografía, Mejor Montaje o Mejor Maquillaje, pero este artículo nunca acabaría.

En cuanto a la porra, de nuevo voy a arriesgar bastante, con la esperanza de que el actual clima político quite un poco de fuerza al sorprendente tsunami en el que se ha convertido "La ciudad de las estrellas (La La Land)", amén de basarme en las interpretaciones que he visto, y es que sigue costándome creer que una película gane el Oscar a Mejor Película sin ganar el de guión:

1. Mejor Película: "Moonlight"
2. Mejor Dirección: Damien Chazelle por "La ciudad de las estrellas (La La Land)"
3. Mejor Guión Original: Kenneth Lonergan por "Manchester frente al mar"
4. Mejor Guión Adaptado: Barry Jenkins por "Moonlight"
5. Mejor Actor: Casey Affleck por "Manchester frente al mar"
6. Mejor Actriz: Isabelle Huppert por "Elle"
7. Mejor Actor de Reparto: Mahershala Ali por "Moonlight"
8. Mejor Actriz de Reparto: Viola Davis por "Fences"
9. Mejor Película de Lengua no Inglesa: "El viajante" (Irán)
10. Mejor Película de Animación: "Zootrópolis"
11. Mejor Cortometraje de Animación: "Piper"
12. Mejor Dirección de Fotografía: Linus Sandgren por "La ciudad de las estrellas (La La Land)"
13. Mejor Montaje: Tom Cross por "La ciudad de las estrellas (La La Land)"
14. Mejor Dirección Artística: David Wasco y Sandy Reynolds-Wasco por "La ciudad de las estrellas (La La Land)"
15. Mejor Música Original: Justin Hurwitz por "La ciudad de las estrellas (La La Land)"
16. Mejor Canción Original: "City of Stars" para la película "La ciudad de las estrellas (La La Land)"
17. Mejor Diseño de Vestuario: Madeline Fontaine por "Jackie"
18. Mejor Maquillaje: Joel Harlow y Richard Alonzo por "Star Trek: Más allá"
19. Mejor Sonido: Andy Nelson, Ai-Ling Lee y Steve A. Morrow por "La ciudad de las estrellas (La La Land)"
20. Mejor Montaje de Sonido: Robert Mackenzie y Andy Wright por "Hasta el último hombre"
21. Mejores Efectos Visuales: Robert Legato, Adam Valdez, Andrew R. Jones y Dan Lemmon por "El libro de la selva"
22. Mejor Cortometraje: "Ennemis intérieurs"
23. Mejor Documental: "O.J.: Made in America"
24. Mejor Cortometraje Documental: "Extremis"

Y ya está, en esta ocasión he acabado con este inmenso artículo a las 8:40 de la noche, "a ver si el año que viene soy capaz de terminarlo al menos un día antes".

8 comentarios:

  1. Madre mía chuchi, cada vez renuevas mas el asunto. Veo que tu también defiendes el Moonlightgate.

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  2. Y tu análisis de la música, vestuario, maquillaje, cortos, documental..... te has quedado corto.

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  3. La del viejo ove me la vi hace un tiempo, y me recuerda sobretodo un poco a gran torino en algunos aspectos XD

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  4. El chuchichat siempre a ultima hora ni que lo programaras tu

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  5. Bueno, bueno, bueno, plas plas plas (aplausos) esto es una entrada en condiciones te felicito ati por hacerla y a mi por leerla jajaja

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  6. ¡¡¡Muy buen artículo, Jesús!!!

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