Censura a la española

Aunque suene a extraño, viniendo de parte de uno de los supuestos países más progresistas del mundo, por segunda vez ha actuado la censura desde que existe la democracia. La damnificada a sido "Saw VI" (2009), una película que creo que nunca veré en mi vida, ya que no he visionado ninguna de las anteriores por el momento ni manifiesto interés por ello.

¿Censura? ¿De qué estás hablando? Bueno, lo que realmente ha pasado es que la Comisión Calificadora del Ministerio de Cultura le ha concedido una X. Sí, esa que suele estar reservada para las películas porno, descubriéndonos a los españolitos de andar por casa un curioso añadido que tiene la ley del cine, que otorga esta calificación tanto a las subidas de tono (las porno) como a las que hacen apología de la violencia. Amarrándose a este último punto, la Comisión Calificadora, que está compuesta por seis vocales que se reúnen por las mañanas para ver una película y decidir para que edad es apta, además de cobrar copiosas dietas por ello, ha decidido por tres votos a dos darle la X (uno no se presentó a la sesión matinal).

El problema de todo esto radica en que la distribuidora de la película, Buenavista, propiedad de Disney, tenía preparadas 300 copias para su estreno en las salas españolas, esperando una gran taquilla dada la cercanía de Halloween (es curioso como se está afianzando en nuestro país esta fiesta foránea). Por contra, esta calificación retrasa su estreno sine die, dado que en España sólo existen 8 salas con permiso para poner películas X y obviamente Disney no quiere que le relacionen con este tipo de distribuidores. Es decir, que de facto con una pequeña triquiñuela legal, la Comisión Calificadora ha evitado su estreno.

Me imagino que los burritos de los aficionados al gore estarán mañana trabajando a todo trapo para conseguir una copia de la película prohibida.

No sé si las imágenes del trailer su demasiado truculentas para tus ojos. En el caso que consideres correcta la opinión de la Comisión Calificadora, no lo veas, por favor. No quiero ser responsable de tu salud mental.



Por cierto, la otra película que ha recibido esta calificación fue "Fóllame" (2000), que le fue retirada dos meses más tarde. Maldigo ese momento, ya que fui uno de los resueltos espectadores que se tragó ese innombrable bodrio.

En cierta forma, aunque estoy resueltamente en contra de la censura (algo alucinante teniendo en el gobierno a un presidente tan progresista como Zapatero), "estaría de acuerdo con imponer una cierta censura, no sobre el contenido de ciertos films, sino sobre su calidad intrínseca, como una especie de filtro sobre la bazofia".