La ballena que resucitó en los estertores del DVD

El DVD se acerca a su merecido final, aunque no se tenga todavía claro cual será su sustituto, el ya omnipresente Blu-ray o las descargas directas. Los números así lo confirman. Con lo que el modelo compra-alquiler que ha alimentado durante los últimos 30 años a los videoclubs está a punto de desaparecer.

Este modelo se basaba en combinar los grandes estrenos cinematográficos con centenares de títulos de serie B y Z. Éstas últimas eran películas que vivían su segunda edad de oro gracias a los abonos mensuales (puesto que ya he pagado y no tengo nada que hacer esta noche, ¿por qué no verla?). De ahí que surgiesen una docena de productoras especializadas en realizar filmes para su lanzamiento directo a DVD.

Bueno, al igual que los videoclubs (que cierran a diario), éstas también están apurando sus últimos años, tratando de hacer toda la caja que puedan. Ahora bien, con el abaratamiento de los efectos especiales están fabricando despropósitos impensables hace unos pocos años, que sonrojarían al más valiente videoadicto.

Un ejemplo de lo que estoy diciendo es "2010: Moby Dick" (2011), donde ni coincide la fecha del título con la del estreno, marzo de 2011. El argumento es tan peregrino que puedo resumírtelo en 8 palabras: "La caza de Moby Dick utilizando un submarino". Te dejo con el primer trailer:

Lo más raro es que últimamente me estoy aficionando a este tipo de trailers, algo curioso teniendo en cuenta que no cabe ninguna posibilidad de que llegue a ver alguna de esta películas, dado que sólo salen a la venta en la zona 1  y "los piratas jamás se molestarían en ripear semejante bodrio".