Caminando por la superficie de Microsoft

No sé porque me meto en estos berenjenales si siempre salgo trasquilado. Bueno, ayer se presentó la nueva propuesta para el mundo tablet de Microsoft, y digo nueva porque no sé por que edición vamos teniendo en cuenta que ya había una edición para tablets de Windows XP. En esta ocasión han decidido copiar el modelo de Apple y presentar su propio hardware para tratar de reeditar el éxito conseguido con la Xbox 360, que es incontestable por el momento.

¿Por qué digo que copia el modelo de Apple? Pues porque se deja de la zarandaja de generar un software para cualquier máquina (qué se lo digan a las empresas asiáticas que están hasta el moño de los requisitos mínimos que tendrán que tener sus dispositivos para correr Windows 8) y se ha planteado crear también el hardware óptimo para correr su propio sistema operativo. Además para más inri la presentación de ayer pecó también del estilo de Apple aunque se quedó a medio camino. Lo que más me gusto fue que hiciesen propio el color azul, un guiño claro a los pantallazos que todos hemos sufrido en el pasado, y prestasen verdadera atención a la ergonomía por primera vez en vez de vendernos un montón de características vacías de significado real (aunque se pasaron con la poda). Te la dejo completa para que puedas verla (Ballmer está sobrio en esta ocasión):

Bueno, sigamos un poco con la presentación antes de meternos en faena, porque da más juego de lo que parece. Lo primero que me extrañó de esta fue la disposición del escenario, más propio de un desfile de moda que de una presentación tecnológica. Lo segundo fue el grado de improvisación, se supone que un acto como éste debería estar estudiado hasta el último milímetro y que no tendría que haber vaguedades o errores. Dejando aparte la confusión que hubo en un principio sobre las diferencias entre el modelo con ARM y el modelo con INTEL, lo que no es de cargo es que se te cuelgue el dispositivo en plena presentación (minuto 14 del vídeo), aunque sea algo clásico en las presentaciones de Microsoft y se trate de un prototipo sin terminar de afinar. Y lo último, muy de Microsoft también, no puedes salir al escenario a hablar de un producto que no llegará a las tiendas hasta octubre o noviembre (el ARM), o peor aún hasta enero (el INTEL), sin decir precios o conectividad telefónica. Es como una llamada de auxilio para que la gente no compre más tablets y esperen durante otros 4-7 meses esta maravilla, pues por lo menos a mi me parece una verdadera maravilla.

Surface es el tablet soñado por todos los geeks, liviano, resistente, con puerto USB libre, generosa pantalla, potencia, cubierta teclado hasta con touchpad y la posibilidad de correr todo el software de tu ordenador de toda la vida. El que siempre quiso un servidor. El problema surge cuando empiezas a leer la letra pequeña de lo que realmente te ofrece Microsoft, ya que hay dos modelos y en realidad nada se parece el uno al otro aunque tengan las misma estética.

El primero, el barato (se supone que andará por el precio del iPad), correrá sobre un chip ARM Tegra (acaso un Tegra 3, eso tampoco lo dijeron) con un Windows RT. Lo bueno es que vendrá con Office preinstalado, lo malo es que para el que no lo sepa es que el sistema operativo instalado, Windows RT, sólo correrá aplicaciones Metro (el interfaz de los cuadritos). Así que olvídate de instalar todos los juegos de tu PC o tu flamante Autocad, hasta que reescriban las empresas de software sus programas en HTML 5 y CSS (vaya, el mismo problema que tenemos los usuarios de IOS). Además la pantalla es del tipo que montan los fabricantes de tablets Android, nada nuevo, y el USB es 2.0 (modificado de alguna forma extraña para acelerarlo dijeron). Vamos, que algo mejor pero no lo suficiente. En descargo de Microsoft decir que probablemente este tablet va más enfocado para el uso con su nube (hasta yo utilizo mi cuenta de Skydrive en más de una ocasión), que no está nada mal sea lo dicho, mucho mejor que la que tiene Apple por el momento hasta que llegue el felino de las montañas, que para los verdaderos profesionales. O sea, que este modelo no tiene lo que todos deseamos, así que habrá que ir al modelo superior.

El modelo superior es la verdadera maravilla de la presentación, con el mismo diseño y un peso de menos de un kilogramo tiene en sus entrañas un INTEL Core 5 de última generación, vamos, una bestia parda. Corre con Windows 8 Pro, el de verdad, tiene una pantalla Full HD (1920x1080) y un maravilloso USB 3.0 de cara al exterior. En él podrás instalar todos los programas que quieras. El equipo soñado por todos. El único problema, el precio, que en principio andará por los 1000 euros sólo con el sistema operativo pelado (el Office aparte en este caso, lo cual no será un verdadero problema en España).

Y es ahí donde nos encontramos en una verdadera disyuntiva, te guardas 500 euros para comprar el primero más la cubierta protectora para utilizar Office, ver películas, leer libros, etc (lo que hace cualquier tablet salvo por lo del Office) o te gastas la friolera de unos 1100 euros en tu tablet soñado cuando puedes comprar un portátil igual de potente por la mitad.

Y es que siempre volvemos a la eterna discusión, los tablets no sirven por el momento para correr la última edición de Autocad o controlar un central nuclear, sino para tareas mucho más sencillas, dígase el uso que le da un servidor. Por ejemplo en mi trabajo el iPad de primera generación cumple completamente su función: tengo los apuntes y libros que utilizo en clase en PDF, llevo hojas de cálculo con las notas de mis alumnos, tengo acceso al ordenador de casa vía WIFI para descargarme cualquier documento que necesite y en cualquier momento lo puedo conectar al cañón para poner un vídeo a mis alumnos. Justo lo que necesito, ni más ni menos, de ahí que no me plantee por el momento jubilarlo aunque no pueda actualizar a IOS 6, supongo que me durará años y años como casi todo el hardware que tengo.

En fin, ahora me tacharéis de fanboy aunque haya dicho que me encanta el nuevo Surface de Microsoft, que ya te adelanto que se venderá como churros aunque algunas preguntas se han quedado en el tintero a raíz de la presentación de ayer: "¿Se podrá actualizar a Windows 9? ¿Qué pasa con las baterías para que no hayan dicho nada de ellas salvo su capacidad? ¿Cuánto dura encendido? ¿Cuánta memoria RAM tiene? ¿Por qué el modelo superior sólo tiene un puerto USB?"