Hoy me voy a poner algo pedante y voy a compartir con todos vosotros uno de mis últimos descubrimientos cinéfilos (algo que no hago habitualmente, dado que si tengo pocos lectores, después de una docena de entradas como esta me quedaría seguramente sin ninguno). La categoría más denostada por la mayoría de los que participamos en las porras de los Oscar es sin lugar a dudas la de Mejor Cortometraje Documental. Esto está causado porque es un género esquivo que solamente es accesible a los habituales de los certámenes especializados. Pero en alguna ocasión alguna de estas obras caen en mis manos.
En esta ocasión te voy a traer el cortometraje que ganó el Oscar en el ya lejano 1959. Se trata del "Glas" (1958) del documentalista holandés Bert Haanstra (acabo de darle a Darkel otro hueso para roer en su cada vez más acuciante cinefagia), donde contrasta la fabricación artesanal de objetos de vidrio con la industrial (como tecnólogo tengo que reconocer que la automatización de los años 50 también era alucinante) utilizando música jazz como contrapunto (por cierto, a los fotógrafos les encantará también como usa la luz). Dale una oportunidad, simplemente te fascinará, aparte de retrotraerte a otros tiempos:
En fin, "para que luego digáis que solo os hablo de frikadas".
No tenía ni idea de quien era pero me ha gustado el corto. Me recuerda a uno que tiene David Lynch sobre una imprenta, pero este es muchísimo mejor.
ResponderEliminarDocumental al estilo de "Como se fabrica....". La verdad que me ha resultado un poco acristalado. Ni aliens, ni explosiones, ni escotes, ná, muy soso. Me coy a CristalGlass que es mas divertido.
ResponderEliminarPense en lo mismo, me recordó a esos programas que se pusieron de moda hace unos años (que ahora ni fu ni fa), al estilo de asi se hace, como lo hacen, etc etc.
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