A lo largo de los próximos diez días estaré de viaje por Asia Menor, razón por la cual he dejado una serie de entradas programadas (el servicio de actualización por el móvil de Google no me termina de convencer), de ahí que aunque no esté detrás del teclado Ucronía latente siga contigo durante este periodo vacacional.
Hoy me toca afrontar de nuevo la ingrata aventura de los aeropuertos y los enlaces apurados. Es lo que toca cuando uno pretende ir a un destino extraño para la mayoría de operadores turísticos. Saliendo a las 9 de la mañana de Ávila, pretendo primero ir en autobús a Barajas para tomar un vuelo a Atenas. Llegado allí debo tomar otro vuelo a Tesalónica, donde recogido el equipaje de nuevo en autobús hasta mi destino final, Alexandroupolis, hacia las 11 de la noche. En definitiva 15 horas de viaje (no me he equivocado al operar, pierdo una hora por cambio de huso horario).
Lo único bueno de todo ello es que lo haré acompañado de buenos amigos que no veo desde hace tiempo. "La plática con ellos será un buen premio de consolación ante tamaño despropósito".
Lo único bueno de todo ello es que lo haré acompañado de buenos amigos que no veo desde hace tiempo. "La plática con ellos será un buen premio de consolación ante tamaño despropósito".
buenos amigos que no ves desde hace tiempo... mmm me parece que te has olvidado de invitarme a mi... quienes son el resto, chuchi, ??? =(
ResponderEliminarSerá bobo este Chuchi, que no ha querido hacer conmigo el camino de Santiago.
ResponderEliminarCon lo bien que nos lo pasaríamos camino del Santiago Bernabeu para ver al Barça ganar la liga y la Champions....