Yo también estudié en la Enseñanza Pública

Yo también estudié en la Enseñanza Pública y estoy orgulloso de decirlo. Me cuesta encontrar, y no es porque sea un profesor que trabaje en ella, un método más racional de formar a nuestra juventud, dándole a todo el que quiera cogerla la posibilidad de ser lo que le dé la gana en la vida, sin líneas rojas definidas por la condición económica o social de la que proceda. Hay un límite para todo y este Gobierno, escudándose en los recortes de la crisis que nos azota, está tratando de desmontarla a pasos agigantados. Es mentira que la Educación Privada lo pueda hacer mejor (no tiene sentido aplicar criterios empresariales a nuestro bien común más apreciado) o que la Concertada (un invento puramente español para subvencionar la Privada no rentable) sea capaz de mejorar los costes para el erario público.

Baste con considerar los únicos modelos privados parciales (allí también hay enseñanza pública) que existen en Occidente, el Reino Unido y Estados Unidos, se nutren año tras año de cientos de miles de obreros y científicos especializados procedentes de otros países dada su incapacidad para generarlos por si mismos. Los demás, los que arrasan año tras año en el Informe PISA, que no se puede tachar de demagógico aunque tiene su defectos, son lo que tienen una fuerte Enseñanza Pública bien estructurada (lo que no quiere decir que centralizada).

Nuestra Enseñanza Pública puede tener problemas, ya sea por una mala implantación de la LOGSE, la falta de autoridad en la aulas o la falta de recursos, pero lo que está claro es que no mejorará aumentando la ratio de las clases, eliminando programas de ayudas al alumnado con problemas o dejando a estos mismos abandonados diez días cuando enferme su profesor.

En fin, podría seguir despotricando sobre el tema largo y tendido, pero en esta ocasión me voy a quedar con el siguiente vídeo que da una idea de lo que está en juego (absténgase de verlo obviamente aquellos que estudiaron en la Educación Privada y cuyo fin en la vida es amasar una fortuna, esto no es para ellos):

Por cierto, "los sollozos empezarán cuando más de uno en vez de plantearse comprar una casa tenga que abrir un fondo para los estudios universitarios de su hijo cuando este nazca".