miércoles, 15 de octubre de 2008

El hombre en el castillo

Hoy voy a comentar la más famosa de las ucronías que se han sido escritas hasta el momento y que marcó, tal vez, el comienzo del subgénero dentro del mundo de la ciencia ficción, aunque existen relatos cortos previos. Estoy hablando de "El hombre en el castillo" (1962) de Philip K. Dick.

Philip Kindred Dick (1928-1982) fue uno de los más importantes escritores de ciencia ficción de todos los tiempos. Incluido en la actualidad en la sempiterno cuarteto de escritores fundamentales de género junto a Isaac Asimov, Arthur C. Clarke y Robert Heinlen, nunca fue valorado en vida en su justa medida. Desterrado a publicar sus obras cortas en las revistas pulp, su popularidad llegó poco después de su muerte con el estreno de la película "Blade Runner" (1982), basada en uno de sus novelas cortas, ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (1968). A posteriori han sido adaptados al cine varios de sus relatos cortos, aunque nadie de la industria del cine se ha atrevido aún con ninguna de sus novelas.

Autor conocido por su estilo casi imposible de imitar, nos transportaba con facilidad a realidades alternativas, ya sea el caso de mundos futuros, recreaciones fantásticas o ucronías; mediante el uso de parcas descripciones dosificadas poco a poco, que jugaban con la cordura del lector la variar de forma drástica la forma en que veía el mundo del que trataba la narración.

En su haber tiene el honor de haber matado a Dios en una novela y contarlo como si fuese lo más normal del mundo.

Sus novelas más importantes son: "Lotería Solar" (1955), "Tiempo desarticulado" (1959), "El hombre en el castillo" (1962), "Tiempo de Marte" (1964), "Los simulacros" (1964), "Los tres estigmas de Palmer Eldritch" (1965), "¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (1968), "Ubik" (1969), "Nuestros amigos de Frolix 8" (1970), "Fluyan mis lágrimas, dijo el policía" (1974), "SIVAINVI" (1981) y "La transmigración de Timothy Archer" (1982).

Por cierto, es el autor de ciencia ficción más adaptado al cine, con 11 películas por ahora, todas ellas después de su muerte.

Vamos con el análisis de "El hombre en el castillo" (1962). El argumento es de los más sugerente:

"Imaginemos que la Segunda Guerra Mundial no la ganaron los Aliados sino que fue el Eje. Los Estados Unidos se encuentran divididos en tres países: los Estados del Pacífico bajo control japonés, los Estados Unidos bajo control nazi y los Estados de las Montañas Rocosas que sirven de zona neutral entre las dos potencias que dominan el mundo. En este mundo discurre la historia de una serie de personajes que se encuentran relacionados indirectamente y que además todos han leído u oído hablar de un libro llamado "La langosta se ha posado", que trata de como sería el mundo en el caso de que hubiesen ganado la guerra los Aliados."

Es decir que estamos hablando de una ucronía dentro de otra ucronía. Un lujo para la primera novela que trata esta temática dentro de la ciencia ficción. Este planteamiento le permitió ganar el premio Hugo a la mejor novela en el año 1963 y que es el único premio importante que ganó Philip K. Dick en vida.

El punto jumbar queda establecido en el momento del asesinato del presidente Roosevelt, lo que ocasiona que su sucesor tome una política aislacionista con respecto a la guerra en Europa.

El libro está estructurado a partir del entrecruzamiento de cinco líneas argumentales básicas, alrededor de otros tantos personajes y que por orden de aparición en la novela son:

  • Robert Childan, vendedor de antigüedades norteamericanas en su tienda Artesanías Americanas S.A., que se encuentra en San Francisco, dentro de la zona de influencia japonesa.
  • Frank Frink, orfebre judío que se encuentra en la misma zona y que acaba de perder su trabajo.
  • Nobusuke Tagomi, jefe de la representación comercial japonesa en San Francisco y que deja todas sus decisiones importantes en manos del "I Ching".
  • Juliana Frink, esposa de Frank Frink e instructora de judo, que realiza una peregrinación hasta la casa del escritor de "La langosta se ha posado".
  • Baynes, espía alemán que se hace pasar por sueco y que tiene que encontrarse con Nobusuke Tagomi.

Como siempre paso a citar lo mejor de esta novela:

  • La presencia continua de dos libros durante todo el relato: el ficticio "La langosta se ha posado" y el real "I Ching", también conocido como "El libro de los cambios". Lo más curioso es que Philip K. Dick dice que utilizó este milenario libro para trazar las líneas argumentales del libro.
  • La historia paralela descrita en "La langosta se ha posado" no es para nada coincidente con la nuestra, sino que difiere bastante, al considerar que la guerra la ganan los británicos y se convierten en la única superpotencia mundial (algo gracioso viniendo de un autor norteamericano).
  • La utilización casi obsesiva por parte de los personajes del "I Ching".
  • La dosificación de la información a lo largo de la narración de la historia acaecida en este mundo paralelo.
  • El desigual desarrollo tecnológico de las potencias ganadoras.
  • La teoría del valor histórico de las antigüedades.

Y lo peor:

  • La falta de un personaje que se encuentre en la zona de influencia alemana.
  • El desarrollo tecnológico alemán es demasiado acelerado, ya han llegado a Marte 20 años después de ganar la guerra.
  • Algunas situaciones que se dan en la novela son de lo más increíble.
  • En cierto momento le da un tono fantástico innecesario.

En definitiva, obviando los comentarios finales con respecto a lo peor, nos encontramos ante una obra fundamental de lectura obligada para cualquier aficionado a la ciencia ficción general y altamente recomendable para iniciarse en el mundo de Philip K. Dick, dado que es una de sus novelas de más fácil lectura.

Para no cambiar de costumbre, cierro con el primer párrafo de esta novela: "Durante toda una semana el señor R. Childan había examinado ansiosamente el correo, esperando encontrar el valioso envío de los Estados de las Montañas Rocosas. Cuando abrió la tienda el viernes por la mañana y vio que en el suelo sólo había cartas pensó que iba a tener dificultades con el cliente."

7 comentarios:

  1. Hala.... otro ladrillo que no interesa a nadie.

    "¿Andestá el javasescrip?"

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  2. Ese es el tema.
    ¿Cuándo podremos volver a leer este blog las personas normales sin que nos dejemos la visión en el intento?.

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  3. Este libro es uno de los que tengo en la pila "virtual" de "libros por leer".

    A ver si me animo algún día, que tiene buena pinta.

    (y estoy con Fredy, a veces es duro de leer el blog, pues la combinación de colores y fuentes es algo "dura", y suelen ser post largos...)

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  4. Acabo de leer este libro, y yo esperaba otra cosa, que hablara mucho más sobre la Alemania nazi por ejemplo.
    A mi no me ha gustado nada, se extiende demasiado hablando de como usan los personajes el oráculo o el libro de los cambios o lo que sea..,que a mi me parece una mamarrachada.

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  5. El I-Ching una mamarrachada...

    El libro es complejo, y no se va a entender ni el dia que te lo acabas ni al dia siguiente, hay que pensar en el, recordarlo, discutirlo con otros. Entonces es cuando poco a poco, te vas dando cuenta de la genialidad de Dick. Hoy he leído "intrincado juego de Matrioskas" si, me gusta. Cuando lo he terminado he pensado (vaya final de mierda, no?) al cabo de una hora pensaba... (bueno, si tengo en cuenta esto y lo otro... en realidad es bastante bueno) esta noche estoy seguro que lo consideraré una genialidad.

    saludos,

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  6. No es un libro muy fácil, al inicio parece hasta medio estúpido y vacuo, pero lentamente va sumergiendote en su delirio y vas notando que algo está peor de lo que parece, algo dentro de esa locura es aún más irracional. No lo puedes intuir siquiera,solo la desazón de estar pisando falso, hasta que lo sabes y el estupor te traga entero. Yo hasta ahora sigo perplejo.

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  7. No es un libro muy fácil, al inicio parece hasta medio estúpido y vacuo, pero lentamente va sumergiendote en su delirio y vas notando que algo está peor de lo que parece, algo dentro de esa locura es aún más irracional. No lo puedes intuir siquiera,solo la desazón de estar pisando falso, hasta que lo sabes y el estupor te traga entero. Yo hasta ahora sigo perplejo.

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