miércoles, 29 de octubre de 2008

Dos mochilas

Vivir en la ciudad que tiene la Academia de Policía tiene sus ventajas. Los automóviles suelen parar en los pasos de cebra, existe una sensación de seguridad y cuando se llama a la policía ésta aparece con cierta premura. Desventajas, algunas veces se ponen multas a horas intempestivas y los ciudadanos creemos que ciertas cosas son imposibles.

Ayer me dirigí al instituto para celebrar la reunión inicial con los padres de mi tutoría. Era una tarde de perros como todo el mundo sabe, pero en ese momento llegaron unos ciertos minutos de calma, en los que paró de llover. Justo delante del instituto hay unos contenedores de basura, algo lógico porque se genera bastante entre el propio centro y las tiendas que lo rodean. Y cuando pasé a su lado vi que había un par de mochilas en perfecto estado colgadas de ellos, con algo dentro. Me detuve un momento para observarlos y me plantee que quién sería el tonto que había dejado esas mochilas allí. Cabeceé un poco y proseguí mi camino.

Una hora más tarde, cuando terminó la reunión observé que había llegado un coche de la policía. Preguntando en conserjería por el tema, me dijeron que alguien les había llamado y que se habían presentado junto con el grupo de desactivación de explosivos. Además me dijeron que éstos habían mantenido una cierta distancia hasta que estuvieron seguros de que no eran peligrosas.

Probablemente no era más que una broma pesada o había una historia de lo más curioso detrás de esas mochilas, pero lo realmente importante es que en ningún momento me planteé que pudieran contener un par de bombas. Me imagino que producto de falsa seguridad que da vivir en Ávila, donde nunca pasa nada digno de mención.

De todas formas en ese momento se me ocurrió una pequeña maldad. Como todos los centros realizamos anualmente un simulacro de incendio o de bomba. Para esta contingencia tenemos en cada clase unos carteles bastante graciosos, donde una mochila con ojos nos indica lo que tenemos que hacer en función del tipo de alarma que suene. Dado que formo parte del plan de evacuación, cuando se da una contingencia de este tipo debo dirigirme al pasillo del que soy encargado y vigilar que toda la gente de éste sea evacuada (sí, soy último en salir, quién iba a pensar que soy un héroe por obligación).

Te preguntarás cual es está maldad. Imagínate que suena la alarma de aviso de bomba cuando estoy reunido con los padres en la clase de sus hijos, "sería gracioso ver la cara que se les hubiese quedado cuando los abandonase para cumplir mi obligación, esperando a que apareciese el encargado de su pasillo mientras contemplan con incredulidad las indicaciones del señor Mochilo."

7 comentarios:

  1. huelga por aqui
    huelga por alli
    y es que del 5-n no va a pasar,
    la huelga se va a celebrar
    ni con mochilas bomba lo evitaras.

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  2. jajaja, chuchi, tampoco hay que ser tan malo. oye, este año tienes por tutoria otra vez a 3ºB? seguro que ellos no te hacen un regalo como el nuestro, jeje...

    por cierto, que tal esta el libro que te regalamos? te ha gustado?

    de que pasillo eres el encargado en caso de desalojo?

    de tu alumno (otro friki):

    alvaro (BoBbY)

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  3. ¿Mochilo? Oye...Ávila es Matrix, no?

    Con tanto agente rulando por ahí y las personas acostumbradas a que nada se salga de las reglas establecidas y parametros normales, es lógico pensar que ese punto remoto del universo llamado "Ávila" sea la auténtica Matrix.

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  4. no seais boludos y hablar de la huelga del 5 de noviembre

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  5. Seguro que si suena una alarma de verdad eres el primero en salir, en esos casos, todo eso importa una mierda...

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  6. No hagaís huelga y seguir leyendo la Ucronia. Total, para que queréis vuestros ojos para lo que hay que ver.

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  7. La abuela Lupe lleva leyendo 15 años Ucronia y a desarrollado poderes de infravisión. ¿No te gustaría tenerlos?.
    Por todo esto: HUELGA NO

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