La penúltima cacicada

Se acerca el fin y Rajoy y sus acólitos parecen no saberlo. Siguen haciendo oídos sordos a los resultados de los últimos encuentros electorales, pensando que una campaña mediática bien organizada regada con dinero en los próximos meses pueden salvarles del debacle que les espera. Aunque ellos estén convencidos de que son las arengas de Cuatro y La Sexta las que les están haciendo daño, al final se trata de dos canales que apenas suponen el 14% de la audiencia general y el 25% en la franja de informativos de las dos de la tarde (peccata minuta). Ya todo se cuece en la Red de redes.

Pero ellos a lo suyo. Mientras se está librando una batalla tremenda en la televisión de pago entre Telefonica y Mediapro, el último estertor del cutre mapa audiovisual perpetrado por Zapatero, que visto el desastre ocurrido hoy de nuevo con el partido del Real Madrid, que se veía mejor en las opciones piratas que en la opción legal de TotalChannel, solo puede acabar de una forma, con la ruina total del grupo del amigo Jaume Roures. El Gobierno en una de sus últimas medidas antes de disolver las Cortes con los presupuestos aprobados (esa sí que es la última cacicada, dejar el primer año del futuro Gobierno completamente atado) ha informado a los grupos inmersos en la nueva adjudicación de canales de la TDT (sí, esos que quitaron de pronto y que ahora devuelven como si aquí no hubiese pasado nada) de quienes se han llevado el gato al agua. Y, como no podía ser de otra manera, atendiendo a unos ignotos criterios técnicos el resultado es cuando menos risible: un canal HD para Mediaset, otro para Atresmedia (lo lógico, dar los mejores canales a los dos grupos que copan el 85% del mercado publicitario y que aún con la pérdida previa de canales se dedican a repetir hasta la extenuación contenidos en sus canales secundarios actuales) y el último a Real Madrid TV (una cosa es ser del Real Madrid y otra es obligar a todos los españoles a serlo). En cuanto a los tres canales en SD, las migajas, a los pequeños grupos afines: uno para Secuoya (sí, ese donde hasta 2011 estaba en su consejo Miguel Ángel Rodríguez), otro para Radio Blanca (o sea, Kiss TV, un canal de música) y por último el cantado para 13TV (lo que liberaría una de las frecuencias de Unidad Editorial, con lo que se cierra el círculo máximo). Te estarás preguntando porque han dejado fuera al grupo Vocento. La razón estriba en que probablemente éste hubiese realquilado la frecuencia a una major norteamericana en cuando hubiese podido.

O sea, un desastre en toda regla, donde lo mejor se da a los grandes grupos para comprarlos y lo demás a los grupos afines para que estén contentos aunque nunca puedan llegar a competir en condiciones con los anteriores. Una jugada que busca un rédito electoral intangible en los dos próximos meses.

En fin, parece que no aprenden de los errores del pasado. Si yo me hubiese encontrado en la misma situación habría creado un paquete único con los seis canales para tratar de venderlo a los grandes grupos de comunicación europeos, ya que tergiversando un poco el proceso podría habérselo colocado a Rupert Murdoch, por ejemplo. Un personaje que jamás permitiría que la linea editorial del grupo se desviase a la izquierda y con la suficiente fuerza económica para competir en igualdad de condiciones con Mediaset y Atresmedia, lo cual sería del gusto de los reguladores europeos. Vamos, una jugada maestra, donde la venganza y un futuro prometedor se encontrarían. "Pero nuestro Presidente lee el Marca en la intimidad, así que Real Madrid TV para todos y en HD".