domingo, 22 de enero de 2012

Era Rajoy - Año 0 - Día 63

Desde hace días te estarás preguntando porque no he vuelto a realizar una entrada de la Era Rajoy. Bueno, la razón de ello estriba en que no sé que publicar ya que parece que el gobierno ha pisado el freno (cabe suponer que por efecto de la elecciones andaluzas) y se dedica a lanzar globos sonda en los medios. Espera, ¿eso no era lo que criticaba el PP del proceder del anterior gobierno? Ya lo sé, pero es que la alternativa, suponer que en un ejecutivo de un mes de vida existen disensiones irreconciliables en la bicefalia económica sería simplemente grotesco. Hasta un servidor tiene que darles algo de confianza, aunque los cien días de rigor se estén agotando al igual que la paciencia de los mercados (me niego a ponerlos con mayúscula).

Así que me es imposible hablar del contrato único o de la penalización del despilfarro ya que parece que entre los ministros no se ponen de acuerdo, con Santamaría ejerciendo de inopinada árbitra. Lo mismo me pasa con la previsión de déficit o de la recesión de longitud variable según quien lo diga. Sin hechos contrastables, nada puedo decir salvo que ahora entiendo lo de que Rajoy no fuese al Congreso hasta pasado el quinto Consejo de Ministros. Obviamente no ha decidido todavía que hacer en ninguno de los frentes abiertos y no podía permitirse ir a hacer el ridículo.

Por otro lado, por eso de cerrar el artículo con algo cómico entre tanta desesperanza, parece que ya hemos encontrado al precursor del uso del verbo hacer como si se tratase de pitufar:



En fin, otra semana quemada en una especie de remanso de paz convulso. "Sólo quedan 1399 días".

3 comentarios:

  1. A la izquierda (la de verdad). Queridos compañeros:

    Como bien sabeis los salarios llevan años disminuyendo y perdiendo poder adquisitivo. El ahorro de las clases trabajadoras y clases medias o se lo han llevado o se lo están llevando. Desde que empezó la crisis, en septiembre de 2007, alimentarnos nos cuesta un 6,9% más (según el INE). Por la energía del hogar, necesaria para ducharnos, cocinar, no morirnos de frío... nos cobran un 37% más. Por llevarse nuestra basura, incluyendo nuestros excrementos, nos facturan también un 14,6% más. El alquiler del pisito nos supone asimismo un 21,8% más. Y, por último, coger el transporte para ir al trabajo, para ir a la escuela o para ir a la compra, representa abonar un 15,6% más. Es decir, y me repito, nos sutraen un 6,9% más por comer, un 37% más por las energías domésticas, un 14,6% más por los servicios sanitarios, un 21,8% más de alquiler, y un 15,6% más por el transporte. Es decir, y me vuelvo a repetir, tenemos que sumar --no hacer trampas y hallar la media (un engaño de consecuencias desastrozas sobre los trabajadores)-- 6,9% más 37% más 14,6% más 21,8% más 15,6% para saber el total de la subida que nos cobran por lo expuesto. El total resulta abrumador: pagamos por esos bienes y servicios un 95,9% más, con un sueldo menor o sin él. Y para qué mencionar los restantes bienes y servicios de primera necesidad que consumimos.

    A finales del 2011 la tasa de riesgo de pobreza entre los ciudadanos de este Estado fue del 26,7%, más de la cuarta parte. A finales del 2010 (del 2011 ni se sabe ni sabrá) las entidades de auxilio social que sirven cama y comida gastaron 11.325 millones más de las antiguas pesetas. Dicho lo dicho, ¿a quién puede extrañar?.

    Y el paro aumenta y aumenta. Lo mismo ocurre con el número de personas en desempleo de larga duración que ya no reciven ningún tipo de prestación.

    En el entorno rural gallego, los pensionistas que aún pueden trabajar o sus hijos o nietos sin empleo comienzan a recuperar la vieja economía de subsistencia. Aquella que les permitió malvivir mientras los jóvenes se iban a las Américas o a las Germanias. ¡Mi padre emigró con tan sólo 12 años!. Aquella economía que también les permitió malvivir con el tocino de cerdo que muchos Caciques entregaban como pago a jornadas inacabables de trabajo. En esta Galicia de prados y brumas están quemando leña en las calderas de gasoil para sobrevivir al invierno, están andando con suelas de zapatos rotas hasta que llegan las rebajas, están volviendo al trueque de huevos o trabajo por leche para llegar a fin de mes, están... Y sólo lo ve quién quiere verlo.

    ¿Cuándo vais a hacer que ardan las avenidas?... Pulsar "Entrar" en:

    http://aims.selfip.org/spanish_revolution.htm

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  2. Que no digo que no comparto lo de MDF, pero nos vigilan o es un conocido de la chavalería?

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  3. Sin echar por tierra el comentario de MDF, que comparto en su mayoría, comentar que hacer una suma lineal de las subidas es cuando menos infantil. Ya que no todos los gastos pesan igual en el bolsillo de la gente.
    Un poco increible es también lo de quemar leña en la caldera de gasoil. Aún no entiendo bien como se introduce la madera dentro de los quemadores de gasoil y se se genera ese proceso de combustión. A ver si alguien puede ilustrarme.
    Y dejando del lado la gracieta, quede claro que me parece que lo que comenta es muy cierto. Y que llevo un tiempo preguntándome en que momento nos aborregamos tanto como para no actuar contra lo que hay y lo que viene.
    Supongo que la táctica de pan y circo tan conocida, sigue funcionando. No es raro que en los últimos tiempos los Madrid-Barça florezcan como setas en otoño.

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